DURA HISTORIA La dolorosa confesión de Noelia Pompa: "No era una sensación, yo fui discriminada por mi altura"  La participante de Bailando por un sueño además contó que tuvo la posibilidad de someterse a un alargamiento óseo pero que no quiso Noelia Pompa estuvo en el programa de Mirtha Legrand y habló de cosas que nunca antes había contado. Dijo que fue discriminada por su altura y que en su adolescencia tuvo la posibilidad de operarse y realizarse un alargamiento óseo, pero no quiso.
"Mi mamá me enseñó a ser guerrera y fue fuerte vivir desde su lado de madre, yo lo viví desde otro lugar más relajada y aceptando, ella lo sufrió más, por eso estoy contenta de que vea que puedo valerme por mí misma", dijo emocionada Noelia en la mesa de Mirtha.
Luego explicó que lo que ella tiene es pseudoacondroplasia: "Es una patología, genética. Es el alargamiento de hueso era una posibilidad. Este programa (ShowMatch) abrió la cabeza para que a mí y a muchas personas se las trate naturalmente".
"Yo estaba segura de que se puede ver normal a alguien, no llego a la alacena, subo a una silla y listo, lo de adentro es importante, lo de afuera es sólo envase. Cuando aprendí eso, pude aceptarme y fue difícil", agregó.
Noelia podría haberse realizado una operación de alargamiento de huesos para crecer unos centímetros, pero no quiso: "Mi mamá quería que lo haga, por una cuestión de que los padres hacen lo que el médico les dice. Para muchas personas no es necesario por cuestión de salud, para otras personas quizás sí, pro el tema de la columna".
"Es muy cruel la operación, es un tratamiento muy largo, lleva un año, a veces hasta cinco, son tutores de metal que tienen una rosquita y todos los días le das un poquito, es lo que a vos te da, lo que tu cuerpo soporta, no es que el médico te puede decir que vas a crecer 10 centímetros. Es muy doloroso, yo no lo necesitaba por salud, hubiera sido estético", explicó.
Cuando ella tenía 14 años, su papá murió y eso fue un quiebre para tomar la decisión: "Era la época en la que tenía que operarme, yo la operación la estiré hasta último momento, las mujeres pueden hacerlo hasta los 18 años".
Si bien ahora está segura y es aceptada por la gente, las cosas no fueron fáciles para la participante de Bailando pro un sueño: "Ahora me siento cómoda, antes no me sentía cómoda midiendo 1.20 y con la gente me cambió todo, no me sentía discriminada, era discriminada. A los dos colegios que fui era la bebota, me cuidaron tanto, gracias a mis compañeros, en mis entornos no era el problema, sino en la calle que hasta las madres codeaban. Nunca tuve resentimiento, nunca me enojé porque eso no me sirve a mí".
Lunes, 8 de diciembre de 2014
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