COBRA FUERZA LA HIPOTESIS DE UN HOMICIDIO Muerte en la cárcel: declararon dos testigos y esperan resultados de pericias  Avanza la investigación por la muerte de Carlos Paniagua ocurrida el pasado 29 de agosto en la Unidad Penal Nº 6 de San Cayetano. Pese a que la causa continúa caratulada como muerte dudosa, la pesquisa se centra en la firme certeza de un homicidio. Declararon dos testigos en las últimas horas. Se trata de dos reclusos que no se encontraban en la celda de aislamiento en la que fue hallado muerto el joven de 20 años.
Por otra parte, de los cincos sospechosos, comparecieron sólo dos. Incluso uno de ellos pidió declarar en la Fiscalía de Instrucción Nº 1, ya que no quería hacerlo en la comisaría donde se investiga el hecho.
“El sumario se encuentra en manos de la Policía. Se está haciendo una buena investigación y una vez que culminen todas las diligencias y se incorporen los informes de las pericias solicitadas, la causa vendrá a la Fiscalía. Allí recién se evaluará el cambio de carátula que es inminente. Todo indicaría que se trató de un homicidio”, informó a El Litoral el fiscal Buenaven-tura Duarte.
“Se están haciendo pericias en el orden planimétrico con el fin de determinar cómo fue encontrada la víctima y en qué estado estaba el cuerpo”, manifestó el representante del Ministerio Público.
“Cuando tengamos la causa en nuestro poder, recién se podría citar a declarar a los presos más involucrados en este homicidio”, dijo Duarte.
Es probable que sobre el final de la semana el expediente ingrese a la Fiscalía. Por el momento, los reclusos sospechosos permanecen aislados.
Cabe recordar que el asesinato del joven Paniagua se conoció el viernes pasado. La víctima, que cumplía condena por robo, fue hallada muerta y con signos de haberse ahorcado.
Fueron dos reos los que informaron a las autoridades de lo sucedido y los que ayudaron a trasladarlo hasta el sector de enfermería.
La autopsia practicada al cuerpo determinó que Paniagua no tuvo la intención de quitarse la vida sino que fue estrangulado.
Mariana Paniagua, madre del recluso asesinado, manifestó su dolor por la muerte de su hijo y aclaró que lo mataron para hacerlo callar. La mujer evitó brindar datos que entorpezcan la investigación, pero aseguró: “Nosotros sabemos que él no se mató, lo asesinaron. Mi hijo no era ningún santo, pero no se merecía morir así, no tenía que haber terminado de esa manera”, finalizó.
Lunes, 8 de septiembre de 2014
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