#NiUnaMenos Radio abierta: participación popular y testimonios escalofriantes  La convocatoria social que tuvo la radio abierta de las organizaciones en plaza Juan de Vera, en el marco de la jornada nacional #NiUnaMenos, demostró que cientos de mujeres están decididas a decir basta.
Que hay familias dispuestas a no callar, que hay amigos dispuestos a acompañar, que hay otras cientos de mujeres que llevan consigo heridas insanables, que hay hombres que vivieron la violencia de sus padres hacia sus madres y quieren también decir basta, que hay niños y jóvenes que comprenden hoy que en los noviazgos y en los matrimonios se puede ser feliz, que la violencia no es amor, que hay una mayoría decidida, pero, evidentemente, faltan políticas públicas que acompañen el cambio cultural.
Tantas historias se escucharon, tantas voces de mujeres, hombres, jóvenes que se acercaron a participar de una radio abierta que fue pensada por las organizaciones y que contó, nuevamente, con el respaldo invaluable de periodistas de la ciudad, que hace tiempo cumplen un rol preponderante en la visualización de la violencia machista como un problema social que urge acciones concretas a los Estados nacional, provincial y municipal.
Entre lágrimas, madres expusieron su dolor sin ningún tipo de temor ni vergüenza, porque estaban acompañadas, porque estaban juntas, porque estaban protegidas. Entre lágrimas, hombres contaron cómo sufrieron durante su infancia que sus padres “molieran a palos” a sus madres y que también se sintieron violentados por padres machistas que los “castigaban” si mostraban algún signo de sensibilidad. Entre lágrimas, una madre pidió auxilio porque su hijo de 9 años le admitió que ya no quiere vivir, porque, a tres años de haberse separado de su expareja, siguen los problemas por cuota alimentaria y régimen de visitas.
Si bien hubo intentos de opacar el esfuerzo de las organizaciones sociales, la radio abierta se fue convirtiendo en el transcurso de la manifestación en el espacio de mayor concentración, porque se entendió que era el momento de escuchar a las víctimas de violencia de género, a los familiares de víctimas de feminicidio, a los amigos de mujeres que son violentadas en sus lugares de trabajo, en sus lugares de estudio y en sus casas; y a los referentes de organizaciones que trabajan día a día para concientizar sobre la gravedad de la violencia hacia las mujeres y la necesidad de contar con un respaldo absoluto y definitivo por parte del Estado.
Era el momento de escuchar el clamor social. En ese sentido, las organizaciones valoraron que algunos legisladores y políticos presentes hayan comprendido que así debía ser, que ellos tendrán tiempo en sus lugares de acción y trabajo para dar respuesta a todas esas mujeres, hombres, jóvenes, niños y niñas que fueron a la plaza. La radio abierta sirvió no solo para hacerse escuchar, sino también para que todas las personas que compartieron sus historias y pidieron públicamente ayuda volvieran a sus casas con una esperanza.
Viernes, 5 de junio de 2015
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