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TODO LISTO PARA LAS URNAS Nuevo mapa político tras la conformación de alianzas para el 5J  La alianza gobernante perdió al Partido Nuevo, pero se aseguró la fidelidad de algunos legisladores de la fuerza. El acuerdo con el PL resulta frágil, según el propio Gobernador. El Frente para la Victoria impuso sus condiciones y cambió de paradigma para los acuerdos electorales. Sólo 8 fuerzas la integran y los lugares no se negociaron. La conformación de las alianzas para las elecciones legislativas del 5 de julio trazó un nuevo mapa político local, que en su relieve vislumbra cambios trascendentales de cara al futuro y en el marco de las proyecciones de cada fuerza.
Las alianzas que polarizaron los comicios en 2013, Encuentro por Corrientes (ECO) y el Frente para la Victoria (FPV), perdieron socios trascendentales para dar batalla en la legislatura. Sin embargo, ambos frentes lograron apuntalar cuestiones puntuales que les redundaría en beneficios a corto plazo.
ECO ratificó su hegemonía local al confirmar que es el frente con mayor cantidad de socios, pese a los escasos escaños por distribuir.
La alianza gobernante tiene 20 aliados y los espacios en disputa son apenas 15 bancas en Diputados y 5 en Senadores.
Además logró recuperar el sello del Partido Liberal, fuerza por la que mantuvo una ardua disputa con el Frente para la Victoria en 2013. Ello pese a que una facción liberal se negó a firmar el acuerdo (ver recuadro). También le arrebató algunos socios al kirchnerismo local, no sólo el liberalismo sino además Unidos por Corrientes.
La gran sorpresa tal vez fue la incorporación de Nito Artaza con Cambio Popular. El senador nacional fue uno de los principales críticos del radicalismo correntino y hasta los enfrentó en las urnas en 2013. Hoy fuman la pipa de la paz y vuelven a ser socios, pese a las chicanas de antaño.
Perdió al Partido Nuevo, aunque se garantizó la fidelidad de algunos legisladores de la fuerza como ser la diputada Eugenia Manccini. La alianza con el nuevismo siempre estuvo atada a estados de ánimo.
La fuerza naranja logró reeditar la alianza 2013 con el autonomismo, que fue un rotundo fracaso, pero ahora apuestan a obtener 50 mil votos. Además sumó el sello de Unión Celeste y Blanco, de Lisandro Almirón. Ello pese a que el apoderado de la UCR, Alfredo Vallejos, aseguró a El Litoral que tenía un acta de alianza firmada por Almirón. “Seguro elegirán en que frente se quedan. Pero tenemos su firma”, dijo.
Almirón, en tanto, dijo “no” haber firmado nada para el radicalismo. “Lamentamos no haber acordado con ECO, pero los radicales son muy mezquinos y Alianza Correntina nos ofreció el primer lugar en Senadores”, explicó a este medio.
El Frente para la Victoria (FPV) modificó su paradigma de alianzas y se mantuvo firme en sus imposiciones a diferencia de lo que ocurrió en 2013.
El kirchnerismo local apenas tiene hoy a 8 partidos socios y se guardó los principales lugares en las listas para los dirigentes de paladar negro. Buscan así evitar beneficiar al oficialismo que en el último año contó con la venia de varios aliados del FPV para avanzar en cuestiones clave.
La apuesta del peronismo será un verdadero desafío y un plafón electoral para el 2017. Ya que apuesta a los incondicionales para derrotar a ECO.
En cuanto al frente Corrientes Merece Más, el diputado Angel Rodríguez pretende erigirse como el tercer espacio que evite la polarización entre ECO y el FPV.
Jueves, 7 de mayo de 2015
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